La película nos transporta a las Guerras Médicas, y la participación de los atenienses en ellas. En primer lugar se nos presenta a nuestro protagonista ateniense, Temistocles, Comandante y entrenador de la armada ateniense. Su aparición encauza la historia, mostrando el pasado de Jerjes y el por qué de su obsesiva intención de invadir las ciudades griegas.
Una vez realizada esta pequeña introducción, la historia nos narra la infatigable lucha de los atenienses contra los navíos del Dios-rey, los cuales son capitaneados por la griega Artemisa, y cuya misión es aplastar a la armada ateniense para conquistar toda Grecia.
La película sigue en la línea de la anterior producción, con muchos efectos especiales realizados por ordenador y sangre a borbotones, que hará de las escenas de acción una delicia para los fans del género.
En cuanto a los personajes, cabe destacar la gran actuación de Temistocles, así como la de Artemisa, que desde el comienzo de la película es mostrada como una fría mujer con comportamiento de ninfómana.
En definitiva, la película es entretenida y palomitera por excelencia, con grandes escenas de acción y bastante amena, si se es amante del género o bien del comic. Por otro lado, si es aceptada en taquilla, seguramente esta saga no será olvidada y nos seguirá enseñando la historia de las naciones griegas.
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