Nada más comenzar la película se nos transporta a la América y Alemania en plena Segunda Guerra Mundial. El protagonista, George Clooney, trata de reunir a un varipinto grupo de artistas junto con Matt Damon, para intentar salvar las obras de arte de la destrucción que provoca la guerra.
Como ya hemos dicho, para ello selecciona a un grupo de escultores, pintores y demás artistas para ser llevados a Europa y tratar de recuperar las obras de arte que los nazis están destruyendo, para que no caigan en manos extranjeras.
La película destaca por su originalidad, ya que aunque es una película bélica, se centra en la parte de estos conservadores de arte, demostrando a todo el mundo lo que hicieron en su lucha para su recuperación, ya que está basado en una historia real.
Nos encontraremos ante una película que tiene ciertos toques de humor protagonizados por Bill Murray y John Goodman, así como pequeñas dosis dramáticas que a más de uno le sacarán su vena sensible. Respecto a su duración podemos decir que no supera las 2 horas (1h 50`) y es bastante amena, aunque las escenas en las que sale Matt Damon se hacen un poco aburridas.
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