Carrie (2013)

Normalmente cuando alguien realiza un "remake" de una película basada en un libro suele fallar estrepitósamente. Pero en esta ocasión más que el clásico "remake" de la película basada en el libro estamos ante una gran adaptación, no de la película si no del propio libro.

Al comenzar la película observamos a nuestra protagonista Carrie (Clhoë Grace Moretz) siendo atacada por sus propias compañeras de instituto, lo que normalmente se conoce como Bulling. Tras sufrir este acoso la profesora de gimnasia encuentra a la culpable y hace que no pueda acudir a su baile de graduación.

Ella para vengarse decide dar una lección a Carrie bañándola en sangre de cerdo. Y a partir de aquí la trama conduce a un gran número de muertes al no poder controlar nuestra protagonista sus propios poderes.

La película hace que nos quedemos enganchados la hora y media que dura, siendo los primeros 20 minutos un poco tediosos, pero que de repente sin más preámbulos termina enganchando a partir de los siguientes. Cabe destacar la gran actuación por parte de la madre de Carrie, Julian Moore, la cual interpreta con gran exactitud a una persona paranoica, esquizofrénica y mentalmente inestable.

Además no nos hemos de olvidar de la actuación de Chloë, ya que su expresividad a la hora de actuar deja mella en todo el film. No es de extrañar que esta chica se convierta en uno de los rostros más conocidos en el cine de los próximos años.

Por todo esto, la película es muy recomendable tanto para los conocedores de la antigua y el libro, como para la gente que no la conoce y quiere pasar un buen rato viendo este título.